Enfrentamientos entre las fuerzas de seguridad y los algodoneros
Es hora de que os dé algunas noticias de la industria del algodón de Burkina. En efecto, después de los conflictos entre los algodoneros y la SOFITEX que ya mencioné en mi carta del 08 de mayo 2011, los que no tienen acceso a la prensa de Burkina Faso pueden creer que todo estaba resuelto. Pero, no es así. En varias provincias, no sólo el boicot a la campaña algodonera es una realidad, sino que algunos algodoneros han destruido campos de algodón de otros productores.
¿Cómo se ha llegado a ello?
Eso es lo que yo mismo quise entender antes de hablarles. Pero, empecemos por recordar algunos hechos. El 09 de mayo, la Asociación Interprofesional de algodón de Burkina Faso (AICB) confirmaba los precios de compra para la próxima campaña. Sólo se concedía una reducción de 1 000 F por saco de 50 kg de fertilizante. El 12 de mayo se leía en la prensa nacional una copia de documento que reflejaba esta última decisión. Esta copia, como procede, está firmada por el Presidente de la AICB, que no es otro que el Presidente de la Unión Nacional de Algodoneros de Burkina Faso. Al día siguiente, este último, es decir el Presidente de la UNPCB, firmaba un artículo fustigando a los algodoneros partidarios del boicot. Este artículo fue publicado en el Sidwaya nº 6923 del cotidiano burkinabé.
Un día tendremos que preguntarnos si la UNPCB está en su cometido (y por tanto plantearse igualmente: ¿cuál debe ser su cometido?) cuando firma como presidente de una estructura interprofesional, el precio de compra del algodón. Cuando no está sostenida por su base, ¿no debería de abstenerse?
El hecho es que, a partir de ahí, el diálogo parecía roto, y que estas decisiones no han gustado a muchos algodoneros. En varias provincias se llevaron a cabo reuniones de productores durante las cuales se tomó la decisión de no producir algodón este año. Más tarde, según se me ha informado, algunos productores que se habían adherido a la decisión conjunta, dieron marcha atrás y sembraron algodón. Fue entonces cuando en muchas partes del país, los más decididos reaccionaron a este cambio de actitud y llegaron hasta destruir estas semillas de algodón.
Se comprende fácilmente de que esto no fue del agrado del gobierno. Pero, ¿era necesario el uso de la fuerza? En cualquier caso, es lo que se ha hecho en Kenedugu (suroeste de Burkina Faso). Lo demuestra el artículo siguiente publicado en el diario Sidwaya del viernes, 15 de julio 2011.
« "Autorizados a intervenir en la provincia de Kenedugu, a requisa especial, para proteger a las personas que han decidido producir algodón, elementos de la policía y de la gendarmería se han enfrentado, el lunes, 11 de julio 2011 en Deina, un pueblo de la comunidad rural de N'Dorola, a los campesinos que han destruido cientos de hectáreas de campos de algodón.
Dada la actual situación en el norte de Kenedugu, el gobierno se vio obligado a asumir sus responsabilidades. En efecto, desde hace algún tiempo, los productores descontentos, impiden a otros que se involucren en el cultivo del algodón. Por ejemplo, el 4 de julio último, 52 hectáreas de campos de algodón fueron saqueadas en Zanfara, por los campesinos del Departamento de Morolaba. Estos campos pertenecen a los productores de Kodona que tienen sus explotaciones en Zanfara, en el departamento de Morolaba. Desde entonces, la tensión es intensa en esta parte de la provincia.
Según nuestras fuentes, las autoridades decidieron tomar medidas enérgicas para acabar con estos actos de vandalismo. Por lo tanto, un primer contingente de las fuerzas de defensa y de seguridad, fuertes con 60 elementos, fue enviado al lugar en la noche del sábado 9 al domingo 10 de julio 2011. Luego, el lunes, siguió otro, compuesto por 45 elementos. Inmediatamente, estas fuerzas de orden se apoderaron de unos pocos líderes. Una situación que ha llevado a otros productores "rebeldes" a tomar por asalto la brigada territorial de la gendarmería de N'Dorola para exigir la liberación de sus compañeros. Ante la negativa de la policía a acatarla, se volvieron al pueblo de Deina, cerca de Bangasso, en donde han destruido más de 100 hectáreas de algodón.
Es por eso que las fuerzas de defensa y de seguridad intervinieron. Y esto ha creado un conflicto entre las dos partes. El balance hace mención de dos vehículos de la policía destruidos y 3 gendarmes con heridas leves. No se ha constatado ninguna pérdida humana. En cuanto a los campesinos, habría también algunos heridos, pero no está claro cuántos. Por ahora, la calma ha regresado a la zona y la policía continúa con sus patrullas para detener a todos los líderes. Siempre según nuestras fuentes, algunos productores "rebeldes" por temor a ser detenido, huyeron de sus aldeas a destinos desconocidos. En estos pueblos, solamente se encuentran mujeres. En cuanto a los campesinos detenidos, habrían sido trasladados a Bobo-Diulaso.
Firmado: Apollinaire KAM
Se han publicado muchos comentarios en la página web del diario Sidwaya. No quiero prolongar la polémica que manifiestan. Voy a concluir, como anunciado, por esta pregunta: ¿la implicación de la UNPCB tiene un papel sindical que podría llegar hasta aconsejar de no producir algodón (si por diferentes razones los productores no encuentran su interés) o se trata de defender la industria del algodón cueste lo que cueste a los productores (en defensa de los intereses del Estado y las empresas de algodón)?
Kudugu, 18 de julio 2011
Maurice Oudet
Presidente del Sedelan
